Querida futura recién estrenada novia,
Te aviso que no va a ser fácil. Seguramente no quisiera una novia cuando esté leyendo esto y sin embargo has conseguido engancharme, bravo. Seguro que estoy más loco por ti de lo que imaginas, seguro que si estoy contigo es porque es lo quiero de verdad pero debes saber un par de cosas.
Me gusta salir a desayunar los domingos y leer el periódico tranquilamente, relajadamente, en paz, en silencio. No te lo tomes a mal pero es difícil de sustituir.
No soy de fregar justo después de comer. La vajilla se acumula en la pila hasta que desborda, hasta que me da vergüenza y me pongo a fregar. Seguro que estaré dispuesto a fregar más a menudo pero no me pidas que friegue después de comer o cenar porque me tocará los huevos aunque lo haga sin rechistar.
Salvo contadas ocasiones, no me gustará mucho que te quedes dormida mientras vemos una película, especialmente si la eliges tú. Habrá días que esté romanticón o calzonazos y no me importe, y te arrope, y procure no despertarte, pero serán excepciones.
Lo que peor llevo de todo son las malas contestaciones. No es plan de ponerse chungo ahora que acabamos de empezar pero es algo que no entiendo ni quiero entender. Creo firmemente que la gente se entiende hablando y no hay razón para ponerse a responder así. Yo no lo haré así que me parece justo exigir lo mismo aunque tranquilo, no es nada exagerado, son LÍMITES lógicos. Lo único diferente es que soy inconscientemente tajante con ellos.
Aunque siempre me interese tu opinión yo me visto como me da la gana y veo complicado que logres hacerme cambiar de opinión. De verdad, no te ofendas, seguro que a veces te hago caso pero, como en casos anteriores, serán excepciones. Y si discutimos por este motivo, será difícil de solucionar.
Seguro que se me ocurre alguna más en el futuro y seguro que tenemos futuro si establecemos los límites.
Te quiero
Nuwanda
No hay comentarios:
Publicar un comentario