Mi Femme Fatale

No me gustan las buenistas ni las buenazas, acaban resultando aburridas, sosas, pierden atractivo. Soy de los que piensa que una mujer que no genere discusiones, piques y críticas, no es una mujer de verdad. Yo creo en aquello de "las chicas son guerreras" –como dice El Guardián en este estupendo post– y también creo en las chicas que montan en bici.

La capacidad de hacer reír a un tío a carcajadas es un don escaso entre ellas pero lo tiene. Pueden hacer reír, sí, pero hacerlo a carcajadas no es nada normal. Preguntas indiscretas, algún taco que otro y un poco de sexo son partes indispensables de una conversación con ella y me encanta que se guste hablando conmigo.

No se anda con rodeos, dice las cosas tal y como las piensa y cuando las piensa. No se avergüenza de nada de lo que hace o dice jamás y no necesita mucho para divertirse. Le gusta como es y no cree necesitar el maquillaje, sólo fuma de vez en cuando y no necesita un buen escote para estar sexy. Siempre tiene la cabeza en mil sitios a la vez...

Adoro el desorden, su desorden, y encontrar su ropa interior desperdigada por el suelo. Me encanta que necesite gafas y sin embargo nunca se las ponga. Me gustan sus camisetas de "estar en casa" y sus camisas para el trabajo y que antes de dormir me pregunte si necesito que me despierte, y responder que sí.

Siempre me empuja cuando la interrumpo mientras lee. A menudo comenta cada párrafo, como si me interesara, y le digo que se calle, pero no se calla... Me gusta que necesite distancia y la obtenga, quiera yo o no. Consigue que salga de copas cuando menos me apetece y lo disfruto, siempre lo consigue. Y me provoca...

Y me conquista otra vez...