Nuwanda se crece

Escribir es una pasión muy útil. Escribir nos permite mejorar y ampliar nuestro vocabulario, nos ayuda a no cometer errores ortográficos, a expresar mejor lo que pensamos.... A mi también me ayuda a desahogarme, me relaja extrañamente, todo es un poco menos importante cuando escribo, me ayuda a tener perspectiva.

Cuando uno escribe todos o casi todos los días aquello que se le haya ocurrido a lo largo del día es imposible que siempre salgan textos buenos. Me gusta pensar que priman otras cosas, mis cosas. Por otro lado, hay días que uno está inspirado, animado, y las palabras salen solas, sin censura, sin miedo, sin pensarlas...

Pero esos días hay que generarlos, hay que provocarlos. Buscar la anécdota, innovar, arriesgar y poder contarlo es una adicción, una motivación extra, una droga muy sana. Y cuando algo sale bien, cuando sale como sólo Nuwanda sabe hacerlo... Esos días, esos días no puedo escribir nada malo, esos días me acuesto orgulloso. Quiero más...

¡Nuwanda se crece!

PD.- Aunque los he escrito absolutamente todos, salvo los vídeos y los artículos de otros autores que comparto, no todos me gustan igual, tengo mis favoritos y algún día haré una lista, la lista de los grandes momentos, de los grandes días...